Por/José Amador/director del Periódico Alta Gama
«Hoy el alcalde saliente, Manuel Jiménez, se propone hacer una rueda de prensa para informar sobre sus 4 años de gestión frente a la alcaldía de Santo Domingo Este. Ojalá no se le olvide pedir disculpas a los habitantes que tuvimos que soportar, 4 años de cúmulo de basura, 4 años de parques descuidados, 4 años de falta de iluminación, 4 años de inseguridad, 4 años de un desorden increíble del tránsito, 4 años de un alcalde prepotente y distante de los ciudadanos. 4 años de encabezar la gestión municipal más incapaz en la historia de Santo Domingo Este. Por esas pequeñas cosas, usted va directamente al safacon de la historia de SDE, y ojalá usted nunca vuelva a encabezar ninguna institución pública.»
Durante los últimos cuatro años, los habitantes de Santo Domingo Este han soportado una gestión municipal que ha dejado mucho que desear. Bajo el liderazgo del alcalde saliente, Manuel Jiménez, la ciudad ha enfrentado una serie de problemas crónicos que han afectado la calidad de vida de sus residentes.
La acumulación de basura en las calles, la falta de mantenimiento de los parques, la escasez de iluminación y la creciente inseguridad han sido solo algunas de las preocupaciones constantes de los ciudadanos. Además, el caos en el tránsito ha alcanzado niveles alarmantes, reflejando la falta de planificación y ejecución por parte de la administración municipal.
Pero más allá de los problemas prácticos, lo que ha indignado a la comunidad es la actitud prepotente y distante del alcalde hacia sus ciudadanos. En lugar de escuchar y atender las necesidades de la población, Jiménez ha demostrado una indiferencia flagrante, dejando claro que su interés personal estaba por encima del bienestar común.
Es imperdonable que durante cuatro largos años, la gestión municipal haya sido tan inepta y negligente. Los ciudadanos merecen líderes que estén comprometidos con el servicio público y que trabajen incansablemente para mejorar la calidad de vida de todos. Sin embargo, en lugar de eso, han tenido que soportar la incompetencia y el desinterés de un alcalde que ha demostrado estar completamente desconectado de las realidades de su comunidad.
Ahora, mientras Manuel Jiménez se prepara para hacer una rueda de prensa para informar sobre su gestión, es crucial que no olvide reconocer los errores y pedir disculpas sinceras a los ciudadanos de Santo Domingo Este. No se trata solo de cumplir con un protocolo político, sino de asumir la responsabilidad por el daño causado.
Esperemos que este sea un llamado de atención para aquellos que ocupen cargos públicos en el futuro, recordándoles que su deber primordial es servir a la comunidad con integridad, humildad y dedicación. Y para el señor Jiménez, queda la lección de que el poder público es un privilegio que debe ejercerse con responsabilidad y empatía, algo que lamentablemente no ha demostrado durante su mandato.
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