Por Robert Vargas
Si tienen tiempo y ustedes siguen el acontecer político en Santo Domingo Este, presten atención a esto: Eddy Olivares, uno de los más brillantes dirigentes del Partido Revolucionario Moderno, está altamente preocupado por la suerte que pudiera correr esa organización en este municipio.
Su preocupación es tanta, que ha llamado públicamente la atención de la dirección nacional del partido para que le preste atención especial a lo que ocurre en esa organización en este municipio que acoge a más de 700 mil votantes y, en consecuencia, es decisivo en materia electoral.
Olivares está atento al desarrollo de los acontecimientos locales, entre otras cosas, porque él es un vecino de SDE, se define como un «villaduartiano» y un «mameyero», en alusión a sus vínculos con los sectores Villa Duarte y Los Mameyes, dos barrios ubicados al sur de la avenida Las Américas.
Aunque ya él no residente en ninguno de esos sectores, sino próximo a la avenida Coronel Rafael Fernández Domínguez, cerca de la base militar de San Isidro, él asegura que nunca se mudará de SDE.
¿Por cuáles motivos está preocupado?
Olivares es de esos tipos acostumbrados a mirar «más allá de la curva». Además, tiene cabeza propia y la usa para pensar en términos lógicos trazando tácticas y estrategias. Es fiel a sus principios y a sus creencias, con las que se puede o no estar de acuerdo.
Él hace rato que se percató de que existe un divorcio total entre el poder local (Ayuntamiento de Santo Domingo Este), que nominalmente está en manos del PRM, y la base y dirigencia media de la organización.
Esto es peligroso porque puede conducir al PRM al fracaso en la gestión de la ciudad y, si eso ocurre, es altamente posible que regresen a la oposición.
Olivares no lo dice literalmente, pero en Santo Domingo Este es moneda corriente la versión de que el alcalde Manuel Jiménez, que usó los colores del PRM y se montó en la ola del cambio para ganar el cargo, gobierna de espaldas al PRM.
No solo eso, sino que Jiménez tiende a gobernar solo o únicamente con el respaldo de un puñado cada vez mayor de sus ex compañeros del Partido de la Liberación Dominicana.
Incluso, en la actualidad, algunos peledeístas que aprendieron a la perfección las lecciones que les dieron los dirigentes del Partido Reformista Social Cristiano, se han colocado bajo la sombrilla de Jiménez y, en consecuencia, pagan con sus opiniones cada centavo que reciben.
Da la impresión de que al alcalde, quien aparenta estar acabado física y políticamente, no le importa el destino que pueda tener su gestión y prefiere gobernar con personas que fueron sus adversarios durante la campaña, aunque es posible que, por lo bajo, tuvieran cierta alianza para derrotar a su mayor contrincante.
Aún así, Eddy Olivares percibe que la pésima relación entre el poder local y el PRM podría tener consecuencias desastrosas para el PRM tan pronto como en el año 2024.
Por ese motivo, urge a prestar atención a lo que sucede en SDE para evitar lo que, a simple vista se ve: que Manuel Jiménez lleva al PRM hacia una derrota vergonzante.
Ante esta realidad, Olivares previene y afirma de manera radical que:
-«No podemos fracasar», aunque conoce que el ejecutivo del ASDE es una persona que «no se deja ayudar».
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