Por Robert Vargas
Por primera vez, en la historia del Ayuntamiento de Santo Domingo Este, el Director de Comunicaciones de esa institución es un funcionario de facto, que es repudiado por una buena parte de los miembro del Concejo de Regidores.
Es tanto el desprecio que por Liriano sienten los concejales, que al regidor Luis Flores no se le apretó el pecho para tacharlo de ser «un carajo enemigo de los regidores».
En consecuencia, Flores ha reclamado que Liriano sea expulsado del grupo de WhatsApp que sirve a los regidores para comunicarse entre ellos.
Después de enumerar y mencionar por sus nombres las personas que no deben estar en ese grupo, entre estos el alcade Manuel Jiménez, la Secretaria General y el asistente del síndico, Flores elevó la voz para exclamar que
-«Y está ahora un carajo que se llama Jhonatan (Liriano) …un carajo que es enemigo de los regidores».
En consecuencia, el concejal recamó al presidente Franklin Marte la eliminación del grupo y que haga otro nuevo sin que en e mismo esté «ese carajo».
Liriano es el único de los miembros del gabinete de Manuel Jiménez que actúa de facto porque su nombramiento no ha sido ratificado por el Concejo de Regidores.
Hace varias semanas, un intento por lograr que el mismo fuera ratificado llevó al caos a la sesión del Concejo y, desde entonces, Manuel Jiménez no se ha atrevido a solicitarle nuevamente a los regidores que le confirmen la designación.
Liriano ejerce sus funciones de Director de Comunicaciones, cobra el sueldo correspondiente, pero sin la aprobación del Concejo.
La semana pasada, este órgano ratificó sin problemas otros tres funcionarios que estaban en la misma condición de Liriano.

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